Las familias son un agente esencial en el proceso de aprendizaje de sus hijos e hijas. En los centros EBI lo tenemos claro y, por eso, nuestro proyecto educativo está en permanente contacto con amas y aitas.
Así, los centros diocesanos son transparentes. A lo largo del año se organizan diferentes jornada de puertas abiertas, para que los padres puedan entrar en el aula y observar cómo trabajan sus hijos. Incluso, en las cocinas y en el comedor.
Por ejemplo, en EBI, al finalizar los proyectos de comprensión, el alumnado celebra una fiesta de aprendizaje en la que muestra lo aprendido a compañeros, profesorado y familias.